Hundimiento del Techo del Automóvil

Un accidente automovilístico puede salirse de control si el impacto sobre el vehículo causa el hundimiento o destrucción del techo del mismo. La mayoría de las lesiones que derivan de este hecho son graves y causan un daño corporal significativo a las víctimas.

Los accidentes de esta naturaleza son muy comunes en Estados Unidos, y las estadísticas indican que un porcentaje considerable de las muertes que se producen como consecuencia de accidentes automovilísticos son causados por la destrucción del techo de un vehículo. Por lo cual, existen una serie de requisitos que los fabricantes de estos techos deben cumplir para cerciorarse de que sean lo suficientemente resistentes para evitar que esto suceda.

En Orange County Personal Injury Attorney, podemos asesorarlo para que reciba una indemnización justa por los daños sufridos. Además, le brindaremos las directrices para llegar a un acuerdo con el responsable si califica para ser indemnizado.

¿En qué consisten estos accidentes?

Existen muchas normas que ayudan a prevenir la ocurrencia de un accidente que provoca la destrucción del techo de un automóvil. En primer lugar, los conductores deben cumplir con todas las normas de tránsito y señales para evitar las situaciones de peligro. Por ejemplo, si el conductor respeta el límite de velocidad legal, es menos probable que sufra un accidente, debido a que tendrá suficiente tiempo para reaccionar en caso de que se presente un imprevisto.

Por lo tanto, el accidente se previene al observar la normativa sobre esta materia. Existen normas específicas relativas a los accidentes de este tipo, las cuales imponen ciertos estándares a los fabricantes del vehículo. En este sentido, generalmente el vehículo es diseñado con resistencia al hundimiento o colapso del techo. En este sentido, la resistencia es el peso máximo que el techo del vehículo puede soportar. Mientras más alta sea, será menos probable que se destruya si ocurre un accidente de esta naturaleza.

En cambio, si la resistencia de su vehículo al colapso del techo es baja, corre el riesgo de sufrir un accidente relacionado. En Estados Unidos, se requiere que el techo del vehículo soporte al menos 1.5 veces su peso para que la resistencia se considere estándar. Sin embargo, en el año 2017 la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras estipuló que el techo del vehículo debe soportar 3 veces su peso para que ofrezca mayor seguridad.

¿Cuáles son las causas de estos sucesos?

Es importante que todos los conductores de vehículos conozcan las causas más frecuentes de los accidentes de estas características, ya que esto lo ayudará a prevenir que usted, sus seres queridos y otros usuarios de la vía sufran accidentes devastadores. Asimismo, las causas más recurrentes de estos sucesos están relacionadas con problemas en el diseño estructural, y montaje del vehículo. Algunas de estas causas son las siguientes:

• Accidentes con varios vehículos. Los choques generalmente ocurren en intersecciones debido a que están entre varias vías y carriles. Por lo tanto, si el conductor no es cuidadoso e incumple las normas de tránsito al cruzar en la intersección, es posible que cause un choque entre varios vehículos. Los accidentes viales que derivan de conducir a exceso de velocidad pueden hacer que los vehículos se vuelquen y terminen boca abajo, con lo cual se destruye el techo de los mismos. Las consecuencias pueden ser incluso peores si el vehículo que choca contra el suyo es considerablemente más grande y pesado. Por ejemplo, si un camión se vuelca y cae sobre el techo de su vehículo, la resistencia de este último no será suficiente para soportar esta presión, causando que el techo colapse y usted sufra lesiones graves.
• Vuelcos. Cuando un automóvil se vuelca, es posible que dé varias vueltas antes de detenerse. Cuando el vehículo finalmente deja de dar vueltas, el techo se encuentra gravemente dañado. Este tipo de accidentes generalmente es causado por conducir a exceso de velocidad en la carretera, ya que frenar luego de conducir a una velocidad elevada por un rato puede provocar un cambio en el centro de gravedad. Tras lo cual, el coche se vuelca y comienza a dar vueltas. Además, cuando alguien conduce a exceso de velocidad, es posible que no se percate de los obstáculos que no pueden visualizarse con facilidad, por lo que no tiene suficiente tiempo para esquivarlo y provoca un accidente en el cual el vehículo se vuelca y se producen daños considerables en el techo.

Las curvas de la carretera también son una causa frecuente de estos accidentes, especialmente si el conductor no las vio con anticipación. En este caso, el giro repentino de las ruedas hace que el automóvil se vuelva inestable, provocando un accidente.

Por otra parte, la fuerza ejercida en la carrocería del vehículo es suficiente para causar daños irreversibles a este en su totalidad. Además, los pasajeros que se encuentran dentro del vehículo mientras este da vueltas, corren el riesgo de perder la vida por las lesiones causadas por los residuos y la fuerza aplicada sobre ellos.

En otros casos, el techo se desprende totalmente del vehículo debido al daño sufrido, y la ausencia del mismo hace que los pasajeros sean eyectados del auto. Este es uno de los efectos más peligrosos de la destrucción del techo debido a que las víctimas se exponen a un daño mayor, el cual puede provocar lesiones corporales permanentes.

• Neumáticos defectuosos. Los neumáticos deben encajar en las llantas de forma segura, para evitar que se desprendan cuando el vehículo está en movimiento. Cuando un neumático se separa, deja inestable al vehículo, por lo que este puede perder el equilibrio y volcarse. Además, es posible que el conductor pierda el control y choque contra otro vehículo. Si con el impacto uno de ellos termina encima del otro, este peso destruirá el techo del vehículo de abajo.

Los neumáticos defectuosos también incluyen aquellos que pueden desinflarse fácilmente, ya que, en algunas ocasiones, una rueda desinflada puede provocar que el vehículo se vuelque, especialmente si se trasladaba a alta velocidad. Si el impacto del vuelco es fuerte, el techo puede colapsar fácilmente sobre las personas que se encuentran dentro del vehículo.

• Centro de gravedad alto. Cuando el centro de gravedad de un vehículo es significativamente alto, todo el peso se traslada a la parte superior del mismo. Por lo que un centro de gravedad alto hace que el vehículo sea más inestable, y que realizar cualquier giro repentino o freno pueda causar una volcadura. Cabe destacar que esto es más común en autobuses y camiones grandes, ya que, si el peso de la mercancía o los pasajeros que transportan estos enormes vehículos se desplaza hacia la parte superior, es probable que se caiga de costado y cause un accidente de esta naturaleza.

Si el techo no es lo suficientemente fuerte, se desprenderá completamente del resto del vehículo, lo cual puede causar daños significativos debido a la carga transportada.

• Fabricación deficiente. A pesar de los requisitos que establece la ley con respecto a la resistencia del techo del vehículo, algunos fabricantes utilizan materiales de mala calidad durante el proceso de fabricación. Sin embargo, las autoridades de control de calidad generalmente no descubren que los fabricantes utilizaron material falsificado o deficiente debido a que luce muy parecido al original. Si el techo de su automóvil tiene defectos de fábrica, existe una alta probabilidad de que colapse fácilmente si ocurre un accidente, independientemente del peso del vehículo que caiga sobre el mismo.
• Instalación incorrecta. En algunas ocasiones, el techo es de la calidad requerida, pero los ensambladores no lo instalan correctamente, por lo que puede desprenderse de la carrocería y exponer a las víctimas a lesiones más graves. Por ejemplo, si el techo es más grande que el espacio que se ha designado para el mismo, no estará en la posición correcta, por lo que puede caerse ante la mínima fuerza. También es posible que se realicen instalaciones incorrectas a los vehículos que estaban en buen estado antes, pero se someten a reparaciones significativas en un taller mecánico. Si el mecánico a cargo de la nueva instalación no está familiarizado con el proceso de instalación requerido, o el diseño del vehículo, lo pone en riesgo de sufrir lesiones mayores si se produce un accidente.
• Obstáculos en la carretera. Algunos accidentes de esta naturaleza surgen como consecuencia de materiales y obstáculos en la vía. Si hay una piedra en el medio de la vía, y un conductor no se percata de la misma, no la esquivará y por lo tanto es posible que el vehículo pierda el equilibrio, con lo cual puede volcarse y esto provocará que el techo colapse. Además, si un vehículo choca contra otro, es probable que la fuerza del impacto haga que sus residuos se esparzan por el aire y caigan en el techo del otro vehículo. Dependiendo de la fuerza del impacto, puede provocar que este techo se hunda o crearle agujeros. Por lo que una vez que los residuos ingresan al interior del vehículo a través de los agujeros, el conductor y los demás pasajeros sufrirán lesiones graves en la cabeza.
• Diseño defectuoso. Las personas que conducen autos descapotables o con techos panorámicos, son más propensas a que se destruya el techo de los mismos si sufren un accidente. Esto se debe a su diseño, el cual tiene un material más débil que el acero de los techos estándar. Si el sistema hidráulico del vehículo falla en volver a colocar correctamente al techo en su lugar debido a un defecto, este puede fácilmente colapsar si ocurre un accidente. Además, algunos techos panorámicos están hechos de materiales similares al vidrio, los cuales son más tendientes a sufrir daños que el acero utilizado en los techos de los vehículos tradicionales. Si el diseño de tales componentes es defectuoso, los conductores de estos vehículos corren un mayor riesgo de que el techo colapse si ocurre un accidente.

¿Qué tipo de lesiones derivan de estos accidentes?

Los accidentes de estas características provocan las lesiones más graves a las víctimas, las cuales pueden sufrir efectos permanentes o a largo plazo que cambiarán su vida de manera drástica. Pero estas consecuencias pueden ser incluso peores para los pasajeros que no estaban usando el cinturón de seguridad, especialmente si fueron expulsados del vehículo. Algunos de los daños corporales que ocurren con mayor frecuencia como consecuencia de estos sucesos, son los siguientes:

• Lesiones cerebrales. Si el techo del vehículo cae sobre la cabeza de la víctima, ésta inevitablemente sufrirá una lesión cerebral grave, ya que el cráneo puede romperse y exponer los delicados tejidos del cerebro a una fuerza mortal. Las consecuencias de una lesión cerebral suelen ser graves debido a que el cerebro maneja la mayoría de las funciones del cuerpo. En el mejor de los casos, la lesión únicamente le causará una conmoción cerebral, o síntomas como mareos y dolores de cabeza frecuentes.

Sin embargo, cuando la lesión cerebral es grave, la mayor parte de los tejidos del cerebro resultan afectados considerablemente, provocando que el paciente termine en coma. En algunas ocasiones, no es posible lograr una recuperación total y la víctima tiene que depender de otras personas a largo plazo.

• Heridas. Aunque pueden ser leves o moderadas, son menos graves que otras lesiones que resultan del accidente. Cuando las piezas del vehículo se desintegran, los bordes metálicos afilados pueden cortar a las víctimas. Además, los residuos de vidrios de las ventanas rotas también pueden causar cortaduras profundas, y si estas se producen en áreas sensibles como el cuello, es posible que pierda una cantidad significativa de sangre y quede inconsciente. Afortunadamente, estas lesiones no son difíciles de tratar y únicamente debe limpiarlas constantemente y evitar exponerlas a gérmenes que puedan ocasionar una infección.
• Fracturas de huesos. Estas lesiones son unas de las más comunes que sufren las víctimas de cualquier tipo de accidente automovilístico. Cuando un techo colapsa y cae dentro del vehículo, es posible que su primer reflejo sea cubrir su cabeza con sus brazos para protegerse. A pesar de que esta acción puede ayudarlo, sus brazos están expuestos al enorme peso del techo metálico, por lo que es posible que sufra fracturas graves en los mismos. Estas fracturas generalmente afectan el húmero, radio, y el hueso cúbito, los cuales sostienen todo el brazo desde el hombro hasta la muñeca.

También es posible que sus piernas sufran lesiones, especialmente si es expulsado del vehículo. En este sentido, si un techo defectuoso se abre, usted está en riesgo de ser expulsado del vehículo de forma violenta, tras lo cual es posible que aterrice en sus piernas para apoyarse, pero la fuerza del aterrizaje puede romper sus huesos en su totalidad. Las fracturas de piernas afectan considerablemente a las víctimas debido a que limitan su movimiento, por lo que deben recibir un tratamiento y utilizar un yeso o aparatos ortopédicos para mantener el hueso en su lugar.

• Lesión de la columna. Aterrizar de espalda después de ser expulsado del vehículo puede ejercer una fuerza excesiva en su médula espinal. Su columna vertebral ofrece soporte y permite que su cuerpo mantenga una postura correcta. Por lo que, si sufre una lesión grave en un accidente automovilístico, esto puede empeorar significativamente su postura corporal.

Además, su columna vertebral alberga las terminaciones nerviosas esenciales que envían mensajes a otras partes del cuerpo. Algunas de ellas son los nervios sensoriales, los cuales transmiten las señales del tacto o el cambio de temperatura. Por lo que una lesión grave en la columna puede dañar o interferir con el funcionamiento correcto de tales nervios. Esto en algunos casos conlleva a que sufra una parálisis total o parcial, la cual puede afectar considerablemente la vida de las víctimas, debido a que la mayoría pierden sus habilidades motoras. Esto significa que no podrán mover algunas o todas las partes de su cuerpo, volviéndose dependientes de sus cuidadores ya que deben utilizar una silla de ruedas. Sin embargo, con un tratamiento especial como fisioterapia, el paciente puede progresar lentamente y eventualmente recuperar esta función de su cuerpo.

• Muerte por negligencia. Muchas personas pierden la vida como consecuencia de estos accidentes. Cuando el techo del vehículo colapsa sobre el cuerpo de una persona, esta no podrá soportar la fuerza. Además, los residuos afilados o las partes desgastadas del techo pueden provocar heridas profundas en el cuerpo de la víctima, existiendo la posibilidad de que pierda demasiada sangre y fallezca como consecuencia de las lesiones.

Generalmente, la muerte ocurre debido a que el suministro de sangre al cerebro es fundamental para que continúen las funciones normales del organismo. Además, se requiere que llegue suficiente sangre al corazón para que se mantenga la presión arterial idónea y el corazón continúe latiendo correctamente. Pero cuando una persona pierde demasiada sangre, el cuerpo no puede cumplir con estas funciones y en algunos casos es inevitable que pierda la vida.

En otras ocasiones, la víctima del accidente está recibiendo tratamiento en un hospital, pero los médicos no se percatan de que tiene síntomas de disfunción orgánica, por lo que estas progresan y causan su muerte.

¿Cómo puede ser indemnizado?

Las víctimas de un accidente de esta índole tienen derecho a ser indemnizadas por todos los daños y perjuicios que hayan sufrido como consecuencia del mismo. Para lo cual, el juez debe determinar quién es el responsable de lo ocurrido. En el estado de California, aplica la regla de la negligencia comparativa en las demandas civiles. Por lo cual, únicamente será indemnizado por la totalidad de los daños si su abogado de daños personales demuestra que no realizó actos negligentes que pudieron haber contribuido a que se produjera el accidente. Pero si el juez determina que actuó negligentemente, tanto usted como el demandando deberán costear los daños conforme al grado de culpa de cada uno.

En cuanto a los daños por los cuales puede ser resarcido, estos son los siguientes:

1. Pérdida de los ingresos futuros. Es posible que algunas lesiones lo obliguen a renunciar a su empleo. Por ejemplo, si debe usar una silla de ruedas por el resto de su vida, pero trabaja en una construcción, será imposible que continúe trabajando. Por lo tanto, el responsable debe pagarle una indemnización por las pérdidas de los ingresos futuros. Los expertos actuariales pueden ayudarle a determinar el monto exacto de esta pérdida para que pueda reclamar su resarcimiento. Antes de aprobar, el juez también considerará otros factores, incluyendo si usted estaba interesado en jubilarse o la fecha de vencimiento del contrato.
2. Gastos médicos. Generalmente, las víctimas de los accidentes de esta naturaleza tienen una recuperación complicada, y constantemente deben visitar el hospital para ser evaluados y someterse a nuevas formas de tratamiento. Por lo que el demandado debe pagarle todos los gastos médicos relacionados con sus lesiones.
3. Dolor y sufrimiento. La víctima del accidente experimentará mucho dolor y sufrimiento, tanto físico como emocional. Debido a que este suceso puede afectar considerablemente su bienestar, tiene el derecho a exigir una indemnización por el daño sufrido, especialmente si le impide realizar todas las actividades que solía hacer anteriormente, como acudir al trabajo o ir a clases.
4. Muerte por negligencia. Si uno de sus seres queridos falleció como consecuencia de un accidente de este tipo, puede reclamar una indemnización por la pérdida de su compañía y salarios futuros. El juez también puede concederle un pago para cubrir los gastos funerarios, con la finalidad de que usted se enfoque en recuperarse tanto física como emocionalmente de esta pérdida y no enfrente más inconvenientes debido a este suceso.

¿Cómo contactar abogados de daños personales que estén cerca de mí?

Reclamar una indemnización luego de sufrir un accidente en el cual sufrió lesiones como consecuencia del hundimiento del techo del automóvil suele ser complicado si no cuenta con la ayuda de un abogado con experiencia. En Orange County Personal Injury Attorney, le brindaremos la representación y asesoría necesaria durante el proceso para que sea resarcido por todos los daños derivados de este hecho.

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